Pedro Jelavić, un joven de 14 años de edad, era un ejemplo a seguir cuando se trataba del deporte.
Su abuelo, una estrella reconocida mundialmente por su gran juego, antes de fallecer le había
enseñado los valores del fútbol y el compromiso que debía tener si realmente quería triunfar. Hoy era
15 de noviembre, una fecha insignificante para muchos pero muy importante para Pedro. Hoy, junto
a su equipo, demostraría el esfuerzo y la dedicación de todo el año. Los Teros (así se hacían llamar)
jugaban la tan esperada final de la liga local. El se despertó y siguió su cábala. Agarró la pelota
naranja y antigua que le había regalado su abuelo, la cual siempre usaba, y se puso a hacer
jueguitos. Sentía que esto lo motivaba. Hizo 50 de ellos como siempre hacía, porque no quería
perder la costumbre.
Su abuelo, una estrella reconocida mundialmente por su gran juego, antes de fallecer le había
enseñado los valores del fútbol y el compromiso que debía tener si realmente quería triunfar. Hoy era
15 de noviembre, una fecha insignificante para muchos pero muy importante para Pedro. Hoy, junto
a su equipo, demostraría el esfuerzo y la dedicación de todo el año. Los Teros (así se hacían llamar)
jugaban la tan esperada final de la liga local. El se despertó y siguió su cábala. Agarró la pelota
naranja y antigua que le había regalado su abuelo, la cual siempre usaba, y se puso a hacer
jueguitos. Sentía que esto lo motivaba. Hizo 50 de ellos como siempre hacía, porque no quería
perder la costumbre.
( focalización cero)
Para seguir con la cábala, preparó un tostado de jamón y queso y un licuado de banana. Lo sirvió en
el vaso que siempre usaba, el cual era muy valioso, ya que era muy antiguo y de la asamblea del
año XIII. Se sentó en la mesa a ver las noticias, terminó de desayunar y subió a cambiarse.
el vaso que siempre usaba, el cual era muy valioso, ya que era muy antiguo y de la asamblea del
año XIII. Se sentó en la mesa a ver las noticias, terminó de desayunar y subió a cambiarse.
(Focalización cero)
Agarró su bicicleta y emprendió el camino hacia el club. Como contaba con tiempo de sobra,
pedaleaba tranquilo mientras observaba todo su pueblo. Había recorrido 3 cuadras, y mientras
pasaba por lo de Martín, el carnicero del pueblo, a quien conocía desde chiquito, se le rompió la
cadena de la bici. Martin, quién justo observaba la calle desde la ventana de su negocio, lo vio y
salió.
pedaleaba tranquilo mientras observaba todo su pueblo. Había recorrido 3 cuadras, y mientras
pasaba por lo de Martín, el carnicero del pueblo, a quien conocía desde chiquito, se le rompió la
cadena de la bici. Martin, quién justo observaba la calle desde la ventana de su negocio, lo vio y
salió.
( Focalización externa)
1-Hola pedrito, ¿qué pasó?- le preguntó el carnicero.
2-Hola Martín. Se me rompió la bici, y sin ella, ¡llego tarde al partido!- dijo Pedro mostrando su
desesperación.
desesperación.
3-Que mala suerte, justo hoy tengo el auto en el taller y no te puedo alcanzar- respondió Martín con
lamento.
lamento.
4-Bueno, vuelvo a mi casa y llamo a un taxi- dijo Pedro frustrado.
5-Nos vemos. Ojala llegues al partido a tiempo- contestó animado
6-Chau, hasta la próxima- dijo Pedro, y comenzó la caminata hacia su casa.
(Focalización externa)
Entré a mi negocio y seguí el día como cualquier otro. Hasta que en un momento vi la pelota que
está arriba de una mesita en mi negocio y me acordé de él. Pobre Pedro, justo hoy en un día tan
importante para él en cuanto al fútbol, tuvo la mala suerte de que se le haya roto la bici. Y esto es
bastante raro, ya que él me contó de haber hecho travesías por la montaña con esta bici, la usa
todo el tiempo y hasta ahora nunca se le había roto. Siento mucha pena por él.
está arriba de una mesita en mi negocio y me acordé de él. Pobre Pedro, justo hoy en un día tan
importante para él en cuanto al fútbol, tuvo la mala suerte de que se le haya roto la bici. Y esto es
bastante raro, ya que él me contó de haber hecho travesías por la montaña con esta bici, la usa
todo el tiempo y hasta ahora nunca se le había roto. Siento mucha pena por él.
(Narrador interno, Martin.)
Pedro llegó a su casa, no lo podía creer, ¡se quería matar! ¿Porque justo hoy, el día de la final,
me pasa esto?, pensó él. Nunca en su vida había sentido tanta angustia y enojo. Se dio cuenta de
que como era domingo, no había ni taxis ni remises, y como hoy el único colectivero estaba de
viaje, no tenía forma de llegar a tiempo. Entonces se le ocurrió una idea. Agarró su camiseta y
empezó a correr. Si iba trotando tal vez podría llegar justo. Agarró una mochila, guardó su vaso
y su pelota, por las dudas.
me pasa esto?, pensó él. Nunca en su vida había sentido tanta angustia y enojo. Se dio cuenta de
que como era domingo, no había ni taxis ni remises, y como hoy el único colectivero estaba de
viaje, no tenía forma de llegar a tiempo. Entonces se le ocurrió una idea. Agarró su camiseta y
empezó a correr. Si iba trotando tal vez podría llegar justo. Agarró una mochila, guardó su vaso
y su pelota, por las dudas.
(Focalización Interna)
Por suerte, después de haber corrido algunas cuadras, se encontró con un amigo que lo llevó en su
auto.
auto.
7-Hola amigo, cuanto tiempo sin vernos. ¿Querés que te lleve?- le preguntó a Pedro.
8-Hola Pablo, si me alcanzás hasta el club te lo agradecería muchísimo- respondió con un tono
ansioso.
ansioso.
9-Claro que te alcanzo. Qué raro que estés a pata y no en bici- exclamó Pablo.
10-Estaba yendo en bici pero se me rompió. ¡Si no me encontrabas iba a llegar tarde!- le contó a
Pablo con bronca.
Pablo con bronca.
11-Al principio no te reconocí, pero cuando vi la remera, me di cuenta de que eras vos- riendo le dijo.
12-Entonces qué suerte que salí con la remera puesta, me salvó- dijo Pedro.
13-Ya estamos llegando, si querés podes ir bajando acá para hacer más rápido… yo voy a estacionar.
14-Dale, muchas gracias por traerme, nos vemos- apurado le agradeció.
( Focalización Externa)
Jugaron el partido y Los Teros ganaron por goleada. Pedro fue la figura del partido: hizo un ‘hat-trick’
(tres goles en un partido), y dos asistencias. Estaba increíblemente contento. Cuando llegó a su casa
a la noche, después de haber festejado toda la tarde, se preparó nuevamente su licuado y habló con
su padre sobre su día:
(tres goles en un partido), y dos asistencias. Estaba increíblemente contento. Cuando llegó a su casa
a la noche, después de haber festejado toda la tarde, se preparó nuevamente su licuado y habló con
su padre sobre su día:
-¡Hola Pedro! ¿Como te fue hoy en el partido?- preguntó ansioso su padre
-¡Hola pa! Tuve unos problemas con mi bicicleta pero llegué a tiempo, y lo más importante fue que
ganamos. Estoy re contentento- exclamó Pedro.
ganamos. Estoy re contentento- exclamó Pedro.
-Después veremos el tema de la bici pero me alegro mucho de que hayan podido ganar, ¡Estoy muy
contento por vos! - dijo el padre.
contento por vos! - dijo el padre.
-¡Gracias! Esto se debe a un gran esfuerzo previo de todo el equipo, desearía que el abuelo
estuviese acá para ver nuestros resultados.
estuviese acá para ver nuestros resultados.
-Estoy seguro de que está allá arriba observando, orgulloso y contento de vos- dijo su papá,
emocionado.
emocionado.
La mirada de Pedro se perdió en aquella pelota que le había obsequiado su abuelo, y luego de
sonreír a la nada siguió tomando su licuado de banana.
sonreír a la nada siguió tomando su licuado de banana.
( Focalización Externa)
Mi pregunta sería ¿por qué los padres no lo podían llevar al partido ya que era tan importante y era un domingo?. Me gusto mucho la emoción y el respeto con que recordaba a su abuelo. La parte del carnicero podría tener un poco más de influencia en la historia, porque quedó un poquito intrascendente. Las fotos están muy acorde con la historia y tiene muchos diálogos y oraciones.
ResponderEliminarme gusto mucho como conectaron todas las imagenes quedo muy bueno. podrian hacer que martin ayudara a llegar a pedro llamando a uno de sus amigos.
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